El licor es una bebida alcohólica dulce, generalmente mezclada con frutas, hierbas, condimentos, flores, semillas, raíces, cáscaras de árboles o aún cremas. El término viene del latín liquifacere, licuando, disolver.

Esto se refiere a las mezclas que se emplean en la fabricación de la bebida. Los licores no suelen ser envejecidos por mucho tiempo, pero pueden quedarse algún tiempo descansando hasta que alcancen el sabor ideal.

La descripción más común de licor es la de una bebida dulce, de alto grado alcohólico. Servido en pequeñas copas, es ideal después de las comidas.

Su composición lleva azúcar, jarabe, alcohol, además de frutas, plantas y hierbas, que dan el sabor característico de cada bebida.

Pero hay otras definiciones de la bebida. Para los franceses, el licor es simplemente un digestivo.

Entre los ingleses, es una bebida específica, hecha a base de un destilado al que se añadió, por infusión, maceración o redestilación, raíces, cáscaras de árboles, flores, frutas o semillas.

La destilación del agua con líquidos aromáticos es conocida desde la Antigüedad.

Pensadores como Hipócrates, Galeno y Plínio escribieron sobre el asunto.

Pero sólo en 900 a. C. los árabes inventaron la producción del alcohol por medio de la fermentación.

Es improbable, sin embargo, que esto haya ocurrido con cereales fermentados en el norte de Europa, poco después de los árabes.

La producción de licor ha conquistado el mundo

La producción de licores se produjo después. Al principio, sólo adocrían alcoholes a los que, groseramente, añadían jarabes y hierbas.

En la Edad Media, el vino era el principal antiséptico. Pero las plantas, raíces y hierbas eran investigadas por los monjes para la cura de varias enfermedades. Los alquimistas llevaron tales investigaciones adelante.

Los registros apuntan a Arnauld de Villeneuve, sabio catalán nacido en 1240, aproximadamente, como el inventor "de los tintes modernos en los que las virtudes de las hierbas son extraídas por el alcohol".

Con su discípulo Ray Lulle, fue el primero en escribir el tratado sobre el alcohol y divulgar recetas de licores curativos. Al alcohol azucarado se mezclaban limón, rosa y flor de naranjo.

Además del aguardiente de vino, otros alcoholes se utilizaban para hacer licores, como el ron. Era común la fabricación doméstica de licores y la utilización en la cocina y la confitería.

Durante el siglo 19, la industria de la destilación creció. Surgieron en el mercado muchas variedades de licores, y los caseros comenzaron a desaparecer.

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