Llevar a tu pequeño amigo a un viaje de campamento puede ser una experiencia inolvidable para ambos, pero requiere cierto cuidado. Acampar con tu perro puede ser muy divertido, pero hay algunos consejos de debes seguir.

Si te gusta acampar y tienes un perro en casa, sabes lo difícil que es dejar atrás a tu amigo cuando sales al bosque. Parece injusto que te diviertas en la naturaleza mientras el perro está cerrado, ¿no? La solución es invitar a tu leal amigo a que te acompañe y disfrutar de las vacaciones al aire libre con él.

Uno de los principales consejos para acampar con tu perro es conocer a tu amigo

Conoces su comportamiento mejor que nadie y puedes imaginar cómo se comportaría en esa experiencia. Considera su temperamento con extraños, niños jugando y otros animales.

Las actividades del sendero requieren un esfuerzo físico, ¡tuyo y del perro! Antes del viaje, llévalo a entrenar contigo. Esto aumentará el acondicionamiento del animal, evitando que se canse demasiado.

Esta también es una oportunidad para practicar los comandos básicos de adiestramiento. Los perros acostumbrados a la gran ciudad pueden estar muy entusiasmados con la naturaleza, que es un riesgo potencial.

Asegúrate de que tu pequeño amigo obedezca órdenes básicas como quedarse quieto, moverse o parar. ¡Esto hace que el perro esté más seguro y tu más relajado!

Incluso si tu mascota está entrenado y se porta bien, no a todo el mundo le gustan los perros. La mascota puede incluso invadir la tienda de campaña de los vecinos con las patas sucias y crearte un problema.

No a todo el mundo le gustan los animales y algunas personas incluso les tienen miedo a los perros. Por lo tanto, debes mantener al perro encerrado. Para que el perro tenga espacio para correr y jugar, lleva correas.

Es importante que garantices la comodidad de tu mascota, así como la suya

Si siente frío y calor, no olvides llevar una manta y ropa, mantener el comedero y bebedero siempre con comida y agua fresca.

Los artículos de equipaje canino obligatorios incluyen comida, juguetes, collares, una cama, productos de higiene y medicamentos. Lo ideal es llevarse los objetos a los que está acostumbrado, porque el lugar es nuevo y los elementos familiares facilitan el cambio.

Recuerda: el perro no puede hacer cosas por él. ¡Es tu responsabilidad proteger sus patas de superficies afiladas, así como alimentarlo e hidratarlo regularmente! Tu mochila será un poco más pesada, ¡pero valdrá la pena!

Planifica dónde dormirás. Piensa en dónde está acostumbrado a dormir en casa y hazlo en el camping. Si duerme en la habitación contigo, colócalo dentro de tu tienda, ¡pero asegúrate de que haya espacio para los dos!

Piensa en la seguridad de tu perro en el transporte

Si vas a viajar en coche, no debe estar suelto; puede ponerse un arnés de seguridad o ponerlo en un trasportín. En el caso de viajar en avión, es necesario consultar a la empresa que vas a utilizar, ya que las reglas varían de una a otra.

Recuerda que esta es una experiencia completamente nueva para él y es muy fácil que las cosas se salgan de control.

Con todo en orden, ¡es hora de disfrutar de la tranquilidad de la naturaleza con tu mejor amigo!