Las pistolas de fogueo, también conocidas con el nombre de detonadoras, están consideradas como armas simuladas y según el Reglamento de Armas son para tenerlas única y exclusivamente en el domicilio, y esta autorizado su transporte dentro de su caja.

En España  “Queda prohibida la tenencia, salvo en el propio domicilio como objeto de adorno o de coleccionismo, de imitaciones de armas de fuego que por sus características externas puedan inducir a confusión sobre su auténtica naturaleza.”

Tipo de munición

Las pistolas y revólveres de fogueo no disparan nada. Has leído bien, digo que no disparan nada, pues al contrario que las pistolas reales que disparan balas, estas réplicas de fogueo utilizan cartuchos detonantes que contienen pólvora real para imitar el sonido del disparo de una pistola, por eso se les conoce como “detonadoras”.

Estos cartuchos están fabricados en metal, y son muy similares a las vainas de las balas, pues incluso llevan el fulminante en la base del cartucho.

Al disparar, o mejor dicho al apretar el gatillo, el percutor actúa sobre este detonante o fulminante consiguiendo que una chispa entre dentro del cartucho y prenda la pólvora que hay dentro.

La pólvora al encenderse consume el poco oxígeno que hay dentro del cartucho pero al expandirse en un espacio tan reducido y sin apenas oxígeno, lo que hace es provocar una explosión, que en el caso de las balas, lo que provoca es que la bala se desprenda de la vaina y por supuesto salga despedida por la única vía de escape que es el cañón.

En el caso de las armas detonadoras, el cartucho no lleva la bala delante sino que lo que lleva dijéramos es un tapón de plástico que no se desprende del cartucho sino que se abre con la explosión. De esta manera no sale nada al exterior.

Seguridad

Todas las pistolas detonadoras llevan el cañón tabicado para que no puedan reconstruirse o adaptarse para disparar balas. Esta protección consiste en un tabique en posición vertical y en sentido longitudinal a lo largo del cañón.

El cañón no puede estar taponado pues tiene que permitir la salida de gases cada vez que se detona un cartucho, esta es la razón por la que le dejan un espacio abierto en el cañón pero a la vez se le divide este con el tabique metálico.

Este tipo de armas a pesar de ser legales solo se venden a mayores de 18 años, por lo que si deseas comprar uno de los muchos modelos que tenemos en nuestra web, deberás marcar la casilla correspondiente para confirmar que eres mayor de edad.

Gama de Precios

En nuestra tienda puedes encontrar revólveres del calibre 380 desde 75 euros y pistolas del 9 corto desde unos 97 euros, ó una 38P negra por 110 euros.

La más cara es la P4 disponible en color negro ó niquel, ambas del calibre 9 mm y con un precio de 122 y 130 euros respectivamente.