Es posible que hayas oído hablar del combate medieval. Al fin y al cabo, todo lo que hace referencia a lo medieval nos da la idea de antiguo, agresivo, violento, ¿no? Esto se vuelve aún más cierto cuando tienes la palabra combate detrás del nombre.

Sin embargo, es muy importante estudiar la historia del combate medieval para que podamos entender de dónde vienen algunas luchas actuales, o incluso la lucha grecorromana o la de gladiadores. El combate medieval puede haber sido una de las primeras formas de lucha que existieron.

El caballero medieval

Responsables de la formación de las fuerzas militares de su tiempo, los caballeros medievales aparecieron entre los miembros de la nobleza medieval. En principio, además del origen nobiliario, un caballero debe tener formación y armas para ascender a tal condición.

En muchos casos, recibieron tierras y derechos de cobro para defender la propiedad de un señor feudal. Con el tiempo, el alcance de esta prestigiosa condición se vio rodeado de mayores exigencias.

Alrededor de los siete años, el joven noble comenzaba su formación caballeresca desempeñando los deberes de un paje. Ya en esta primera fase, aprendía sobre la equitación y el manejo de las armas que usaba un caballero.

A la edad de doce años el aprendiz era nombrado escudero. En ese momento, acompañaba a su señor en los campos de batalla y profundizaba su conocimiento del manejo de la espada. Además, mejoraba su condición física en peleas, carreras y desafíos de esgrima.

Entre las edades de 18 y 20 años, el escudero hacía su transición de la juventud a la edad adulta al convertirse en caballero. El ritual de consagración del caballero era una solemnidad de gran importancia, ya que en algunas ocasiones contaba incluso con la ilustre presencia del rey.

La noche anterior al evento, el aspirante ayunaba y realizaba la vigilia de las armas. Cuando llegaba el gran día, el futuro luchador era desafiado en simulacros de combate que demostraron su eficacia.

En situaciones de guerra, los caballeros se organizaban en diferentes puestos de batalla. Tan importante como su posición y habilidades, un caballero no podía sobrevivir mucho tiempo en la guerra sin su caballo.

Si tu montura se perdía, la muerte era casi segura. A finales de la época medieval, la formación de los ejércitos nacionales y la introducción de las armas de fuego debilitaron la imagen del caballero, que pasó a formar parte de las leyendas de una época.

Conociendo el deporte Combate Medieval

Muchos se preguntan cómo practicar deportes menos conocidos o participar en iniciativas que hagan reconstruir la historia de la forma más fidedigna posible. Podemos comenzar con uno de los deportes más exitosos en la actualidad: el Combate Medieval Histórico.

El Combate Medieval es una actividad que toma como modelo la representación de las batallas en la Edad Media.

Compuesto por dos grandes organizaciones, es un deporte que involucra algunas modalidades: Duelos, ya sea de espada y escudo; espada larga, etc. También está lo que más llama la atención de los espectadores, el combate en grupo, famoso por ser violento en todos los aspectos, con el objetivo de tumbar al suelo a todo el equipo contrario.

Una curiosidad es que las armas son de metal, eso sí, sin posibilidad de corte. Después de todo, a pesar de ser un deporte que se toma en serio, la idea es no lastimar a nadie.

El objetivo de Combate medieval depende del modo de batalla que se esté jugando. En el duelo, la meta es la puntualización con solo “golpes limpios" sobre el rival. En otras palabras, no basta con apoyar el arma en el rival, tiene que ser un golpe que realmente impacte en el oponente. 

A diferencia del duelo, en las batallas el objetivo es acabar con los rivales. El equipo que derriba primero a sus oponentes gana.

Para ser una batalla fiel a la historia, los guerreros deben utilizar todo el equipo, como espadas y armaduras, de la misma época y región. Es decir, no usar una espada del país A y una armadura del país B. El deporte se toma realmente en serio.

Consejos sobre deportes de combate medievales

A pesar de que el peso del equipo alcanza los 30 kg, no es tan absurdo. Esto se debe a que el peso se distribuye uniformemente por todo el cuerpo. Sin embargo, como cualquier deporte, es importante que no empieces sin preparación. 

Acostumbrarse al equipo y entrenar mucho es fundamental para un buen peleador.

No practiques el deporte pensando que el objetivo es lastimar al oponente. Aunque se considera una práctica violenta, los atletas se respetan mucho. Así que sigue las reglas, como no golpear el cuello y atacar con la punta de la espada.

El combate medieval comparte los valores de cualquier deporte: disciplina, respeto al rival y sacrificio. Además, la hermandad y el honor son valores heredados de una época a menudo exaltada.

En España ya existe una federación de clubes deportivos que practican este impresionante deporte de contacto que se practica con armaduras réplicas de los siglos XIV y XV, exactamente igual que se hacía entonces.

El Castillo de Belmonte se ha convertido en la sede de un deporte que hasta hace poco era un total desconocido en España, los combates medievales. Este deporte tan joven en nuestro país ha comenzado a llamar la atención de muchos y la curiosidad de otros tantos. 

Con el objetivo de fomentar, el pueblo de Belmonte ha logrado convertirse en la sede de los próximos mundiales de combate medieval, todo un privilegio.

Entonces, ¿a qué estás esperando para comenzar tu jornada como un caballero de combate medieval?