Todo ser humano tiene naturalmente un instinto de supervivencia. Por muy civilizada que sea una persona, en situaciones extremas, en las que su vida corre peligro, ese mismo individuo se transformará por completo.

Muchos se superan a sí mismos, logrando cosas que ni siquiera se creían capaces de hacer. Situaciones como desastres naturales, catástrofes provocadas por la humanidad, ruptura del orden social y político, colapso general de la sociedad, colapso económico y emergencias sanitarias, son algunos ejemplos.

Ocurre que la naturaleza humana es algo bastante complejo, que sigue siendo influenciado diariamente por diversos elementos que harán que el ser humano tome ciertas medidas que a veces son desproporcionadas para la ocasión. Por otro lado, esta desproporcionalidad también podría ser la causa que te mantendrá con vida.

Supervivencia, del latín supervīvens ("que sobrevive"), es la acción y efecto de sobrevivir. Este término, a su vez, se refiere a vivir después de un evento determinado, vivir después de la muerte de otra persona (un ser querido, por ejemplo) o vivir en condiciones adversas y sin medios ni recursos.

La naturaleza humana

El principio de la naturaleza humana reside en la supervivencia y los seres humanos establecen dominios para garantizar: la familia, la nación, la raza y la especie.

La necesidad de defenderse y cazar desarrolló naturalmente el instinto de supervivencia de la especie humana a lo largo de su historia. Durante millones de años, el hombre utilizó sus armas naturales, es decir, sus manos y dientes para sobrevivir, cazando o incluso defendiéndose de otras especies y, en ocasiones, incluso de otros humanos.

El instinto, del latín instintu, es algo innato en un ser vivo, un tipo de inteligencia en su nivel más primitivo. Guía al hombre y a los animales que tienen un grado superior en su trayectoria por la vida, en sus acciones, apuntando precisamente a la preservación del ser.

Los instintos se adquieren en las experiencias vividas, en el enfrentamiento a determinadas situaciones y en las respuestas a las mismas, y luego son heredados por las generaciones posteriores. Se manifiestan en los hombres, la mayoría de las veces, a través de reacciones a ciertas emociones.

El superviviente es la persona que logra mantenerse con vida en situaciones extremas

Las técnicas de supervivencia son aquellos conocimientos que permiten a una persona mantenerse con vida si está aislada en medio de la naturaleza. Estas técnicas permiten al sujeto comer, protegerse del clima y tratar heridas menores.

Los militares y los exploradores son las personas que tienden a educarse en técnicas de supervivencia. Suelen realizar sus travesías o expediciones equipados con lo que se denomina un Kit de supervivencia, que incluye navajas, tijeras, material de primeros auxilios, etc.

Hoy hay un movimiento, un estilo de vida que ampara a personas que se preparan para enfrentar emergencias o adversidades que pueden cambiar drásticamente su forma de vida.

Son personas que buscan la autosuficiencia desde diferentes perspectivas y para ello realizan capacitaciones y adquieren equipos que pueden ser esenciales para el mantenimiento de la vida, como un botiquín de primeros auxilios, un arma para la autodefensa y aun así mantener reservas de agua. y comida.

Una de las prerrogativas del survivalismo es la preparación previa para enfrentar estos incidentes, anticipándose o mitigando los efectos primarios o secundarios de la amenaza, un buen ejemplo de esta preparación es tener una linterna lista para enfrentar un apagón, y conocimientos aplicables en situaciones difíciles.

Instinto de supervivencia: corresponde a todos los comportamientos básicos que nos permiten conservar la vida y la salud.

Entre ellos están: evitar el peligro, alimentarse, buscar refugio, etc.

Algunas historias reales de supervivencia

¿Hasta dónde, o al extremo, puede llegar un ser humano para preservarse a sí mismo? La respuesta a eso es relativamente simple, pero aún fascina a todos: no hay límites, no hay ética, para preservarse uno mismo.

Hugh Glass - La historia de supervivencia de Hugh Glass quedó inmortalizada en “El renacido” (The Revenant, 2015). Hugh Glass fue un explorador de las Américas, en una época marcada por la conquista de continentes y la explotación peletera a principios del siglo XIX.

El explorador fue atacado brutalmente por un oso y quedó con heridas graves. Como ya sabes logró sobrevivir cuando todos creían que no aguantaría.

Aron Ralston - Era un practicante muy dedicado a los deportes de naturaleza. Siempre que podía, viajaba durante varios días para ir a los lugares que más le gustaban. Sin embargo, Ralston cometió un error muy común entre los practicantes de deportes outdoor, que es sentir una superioridad ilusoria e ignorar todas las reglas básicas de seguridad.

Se dio a conocer en mayo de 2003, cuando se vio obligado a amputarse el brazo derecho con una navaja prácticamente ciega para liberarse de un peñasco que le aplastó el brazo contra un muro de piedra.

Ralston estuvo aproximadamente 127 horas sin comida, agua y ningún tipo de ayuda para salir de esta situación. 

Tripulación del vuelo 227 - Un avión que transportaba a un equipo de rugby uruguayo, acompañado de familiares y amigos, para un amistoso en Chile, se estrelló en algún lugar de la Cordillera de los Andes. De los 45 cinco pasajeros a bordo, 29 sobrevivieron al accidente y solo 16 fueron rescatados con vida.

El accidente se conoció como la Tragedia de los Andes. Con poca comida, sin fuente de calor y a más de 3.600 metros sobre el nivel del mar, lograron sobrevivir a base de carne humana.

Sir Ernest Henry Shackleton - Poco antes del estallido de la Primera Guerra Mundial, Sir Ernest Shackleton partió con su tripulación en un intento de cruzar la Antártida a pie. Pero antes de que la expedición llegara a tierra firme, su barco quedó atrapado en un bloque de hielo en el mar de Weddell.

La tripulación de 27 personas no tenía medios de comunicación ni esperanza de ayuda externa y permanecería aislada durante los próximos 22 meses. La tripulación vivió dentro del barco durante casi un año antes de que el hielo se rompiera y permitiera la navegación.

El contenido de este artículo se vuelve bastante relevante, ya que aborda una complejidad de acciones internas que el ser humano puede sufrir cuando se le coloca en una situación estresante que puede incluso amenazar su vida.

Sobrevivir es nuestro instinto más primitivo, es el instinto que nos hace continuar o detener algo, es nuestro instinto de correr o de defendernos, es lo que nos hace temer las fuertes lluvias cuando estamos desprotegidos.