Las actividades extremadamente complejas y fundamentales para la sociedad. El arte de vencer obstáculos que ofrecen altitudes elevadas, vértigo gana cada vez más relevancia y adeptos mundo afuera. Pero el rápel no es solo un deporte, también salva vidas.
Con el avance de las tecnologías y desarrollo de productos, así como la amplia necesidad de calificar diversas áreas profesionales.
El rápel conquistó su espacio en las sociedades modernas.
Actualmente la técnica es imprescindible y la difusión de su capacitación es bastante común.
El rápel está en situaciones de riesgo como operaciones de rescate, tácticas operativas policiales.
Y en ocasiones de lo cotidiano simples que van desde la instalación de calefacción y pintura de un edificio, a las actividades en el campo y aventuras.
También a exploradores que necesitan acceder a lugares de difícil acceso para dar amplitud a sus estudios.
No basta sólo dominar el arte de bajar en cuerdas.
Es necesario tener pericia en movimientos y en estrategias de progresión en ambientes que requieran tal modalidad.
Profesionales como policías y bomberos, por ejemplo, tratan diariamente con ocurrencias de búsqueda y rescate.
Por eso, para encarar el rápel táctico, el operador debe estar familiarizado con estructuras móviles como helicópteros, y también fijas en el caso de edificios y puentes.
Por más que extremadamente preparado, un profesional del área necesita cargar herramientas vitales para la plena ejecución y éxito de su misión.
Para ello, el agente apto para la realización de diligencias con uso de rapel necesita dominar el saqueo de armas, el porte de instrumentos como haces y marchas, además de realizar maniobras y movimientos.
La gran diferencia está en los usos distintos de la técnica, sus exigencias de múltiples habilidades y el ambiente a que se aplica.
Además de la cuerda, por supuesto, la práctica del rápel requiere equipos cruciales para la actividad.
No hay que decir que, debido a todo riesgo que implica, esas herramientas deben siempre tener sellos de calidad.
Garantías y el desarrollo de marcas responsables y conceptuadas en el mercado.
Además de los equipamientos básicos de seguridad como cascos, calzado y vestimentas adecuadas.