A pesar de la llegada de las pistolas eléctricas, la mayoría de las personas, ya sean jugadores, tiradores de competición o coleccionistas, siguen prefiriendo armas de gas. Sin embargo, hay mucha contra-información alrededor de los diversos gases disponibles y de cuándo, dónde y cómo utilizarlos.

gas y el co2

Aunque cada vez hay más réplicas eléctricas más realistas, aún la mayoría no consiguen acercarse a la sensación que transmite una réplica de gas.

Las réplicas de airsoft de gas son las más usadas por los jugadores expertos, y sin embargo, no son del todo recomendadas para jugadores novatos, ya que pueden provocarle algún disgusto.

Los mitos más grandes son acerca de la absoluta performance de diferentes gases y de la confianza que ciertas armas tienen con ellos.

Existen diferentes tipos de gas para airsoft, y la utilización de un gas incorrecto o bien la mala utilización de uno, puede dañar la réplica.

El gas además, se ve afectado por las temperaturas, por lo que según la época del año en la que se vaya a jugar o el clima de la zona es recomendable optar por uno u otro.

Diferencias del gas y el CO2

La primera diferenciación que debería hacerse es entre gas y co2. El CO2 tiene un coste más elevado que el gas, se suministra en pequeñas capsulas de 12 gramos, que son de usar y tirar, mientras que el gas es recargable.

El CO2 trabaja mejor en bajas temperaturas pero en altas puede hacer que la réplica vaya algo pasada.

A excepción del CO2, los gases más comunes son el HFC-134ª, es de potencia media y se recomienda para pistolas con Blowback.

El Green Gas, que es el gas con más respeto hacia el medioambiente, consiguen una mayor potencia en el arma, pero si no se sabe usar también puede provocar desperfectos en la réplica, y estos no están cubiertos por el fabricante.

Hay un tercer tipo de gas, llamado Gas de Mantenimiento que está indicado para aquellos jugadores que se pasan largas temporadas sin tocar la réplica, ya que incorpora un alto nivel de lubricante.

Cualquiera que sea el gas que uses, no te olvides de mantener tu arma bien lubricada con aceite de silicona, especialmente las partes móviles y las válvulas de la cartera. Si no, rápidamente aparecerán fugas y tu arma no tendrá un rendimiento óptimo.