No toda las brújulas son iguales, aunque obviamente todas utilizan el mismo principio del magnetismo y el funcionamiento es muy similar, diferenciándose por tanto en su aspecto exterior o bien en los materiales utilizados, Las brújulas más cómodas no son las brújulas de bolsillo, ya que como su propio nombre indica, estas serían las más cómodas de llevar por su tamaño, pero hablando de brújulas no puede hablarse de comodidad sino mas bien de sencillez de uso aunque como decimos, todas las brújulas prácticamente hacen una sola cosa, señalar al norte. Orientarse mediante la brújula es tarea fácil siempre y cuando tengamos un conocimiento mínimo de donde estamos a al menos hacia que parte debemos ir, y  esto se vuelve todavía más fácil si tenemos a mano un mapa del terreno. La brújula se coloca sobre el mapa y una vez que conozcamos el norte, toca alinear el mapa sin mover la brújula, de manera que la aguja marque la dirección del norte del mapa, y en estos casos se agradece la ayuda de una brújula de base transparente también llamada brújula cartográfica, ya que nos permitirá interactuar con el mapa de manera que podríamos incluso trazar líneas y rutas en el mapa, o pasar la brújula por encima de los detalles del mapa sin perder de vista los mismos ya que la base hay que mantenerla alineada al norte y funcionará como una prolongación de la aguja. Con otro tipo de brújulas podemos hacer lo mismo, pero al no tener la "prolongación de la aguja", necesitaremos algo más de experiencia para mover la brújula sobre el mapa en determinados momentos, aunque de todas formas si uno es demasiado experto quizá se apañe con cualquier tipo de brújula, pero en mi opinión las que vienen con su base transparente son mucho más fáciles de utilizar encima de un mapa.