Dado que el hombre tomó un palo y lo usó como protección, el arma blanca es el símbolo más claro de guerra y honor. En general, en términos de formas, materiales y símbolos, el arma es un arquetipo del noble y justo, el defensor de su hogar, país e historia.

 Y es a través de ellos que examinamos nuestro pasado, acciones e identidad hoy. 

 Orígenes de las armas blancas

Los orígenes de las armas blancas pueden situarse mejor en la era paleolítica, cuando abundaban las hachas, los cuchillos y las puntas de lanza, con la aparición de la espada cerca del comienzo de la industria metalúrgica en Oriente, alrededor del año 5000 a.C. , cuando se desarrollaron sofisticadas técnicas de forja y fundición. 

Primero se utilizó cobre y luego bronce para la construcción de navajas hasta el 750 a. C., por desgracia se rompían con bastante facilidad, lo que se puede solucionar utilizando hierro y acero, que son las materias primas de la mayoría de las hojas modernas. 

A partir del siglo XVIII, con el desarrollo de la pistola, el arcabuz y el cañón, el término arma adquirió dos subespecies: armas de fuego impulsadas por pólvora y armas blancas de base humana, generalmente cuchillas. y la fuerza del brazo. 

Al mismo tiempo, el diccionario de Bluteau distingue las armas de fuego de las armas blancas, que dice que se llaman así "porque estaban hechas de acero blanqueado o plateado". Cabe recordar que blanco proviene de la palabra alemana para nada "brillante, pulido, blanco", que combina perfectamente con la apariencia del acero. 

Recién en la Edad del Hierro se pudieron alargar las hojas hasta adquirir las dimensiones que las caracterizan hoy, y con el cambio de importancia se evidencia un cambio en su uso, pues un arma contundente y cortante pasa a ser un objeto que puede hacer un "corte" que es su característica principal. 

¿Qué se considera un arma blanca?

Un arma contundente es un arma o herramienta caracterizada por la capacidad de cortar, envolver o perforar bordes afilados o cortantes. A diferencia del arma de fuego, el arma blanca no requiere munición ni propulsor para cargarse. 

Las armas son cualquier objeto que puede usarse para atacar o defender a alguien, pero que básicamente no tiene tal propósito.

Hay otra definición que dice que un arma blanca es cualquier objeto hecho para atacar a alguien o algo pero con la mano, como espadas, dagas, puño americano etc. Recuerda que aunque no existe una legislación muy clara sobre el porte de armas blancas, no se deben utilizar fuera de casa, especialmente en lugares públicos. 

Debemos saber que un arma blanca no es sólo un cuchillo, una navaja, un hacha o un machete, sino que también incluye cualquier objeto que pueda dañar a otra persona que no sea un arma. 

Tipos de armas blancas

Las armas blancas se dividen en categorías, compruébalas:

Cortantes - Son instrumentos caracterizados por un borde fino llamado ranura, que es lo suficientemente afilado como para cortar tejido con presión deslizante, lo que hace que la cuchilla continúe cortando a medida que se mueve. Buenos ejemplos de armas blancas son las navajas, los cuchillos y las navajas de barbero.

Punzantes - Son instrumentos de punta afilada, de sección circular o poligonal. El instrumento es para perforar. Un ejemplo de esta especie es la aguja o el florete. 

Contundentes - Las armas que usan presión de impacto se clasifican como contundentes, que causan fracturas de huesos debido a su masa cuando se lanzan o usan contra alguien o algo. Un bate de béisbol y un martillo son ejemplos de armas cuerpo a cuerpo contundentes. 

Corto-contundentes - Las piezas que actúan como dispositivo de corte se clasifican como cortantes, pero también, por su masa, también ejercen un efecto contundente o aplastante sobre los tejidos afectados. Buenos ejemplos de esta categoría de armas son el hacha y la hoz.

Cortopunzantes - Son dispositivos médicos como agujas, bisturís y otras herramientas que cortan o penetran en la piel. Aprender a manejar estos objetos de forma segura es importante para evitar cortaduras y punciones accidentales con agujas.

Conclusión

Las tipologías de las armas blancas son variadas. En nuestra colección encontramos principalmente: espadas, sables, dagas, bayonetas, puñales y cuchillos. Si bien todas poseen características propias que las diferencian unas de otras, gran parte de su morfología es transversal para todas.

En este sentido se diferencian de las armas de fuego, ya que no necesitan de un proyectil para poder ser usadas.

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