Un escudero era la persona que se encargaba de servir a un caballero en sus tareas cotidianas. Normalmente eran individuos de origen noble, pero su linaje tenía un rango muy humilde dentro de la jerarquía de la nobleza. En el feudalismo se estructura la población en una pirámide social. En la cúspide de la pirámide se encuentra el monarca. Por debajo de él, están los señores feudales, que son los dueños de la tierra. Los súbditos del señor feudal son los vasallos, quienes se dedican al cultivo de las tierras. Para proteger los territorios o feudos los señores feudales formaban ejércitos, los cuales estaban integrados por caballeros, así llamados porque tenían los medios económicos suficientes como para mantener a un caballo. Los caballeros se dedicaban a la milicia y para ello contrataban los servicios de un asistente, el escudero. Paralelamente, los nobles tenían otro tipo de ayudantes, los pajes. Si un hombre era nombrado escudero por un caballero, se entendía que había logrado un mayor prestigio social. Como asistente, tenía que mantener las armas de su superior, cocinar para él, acudir a actos sociales y, en definitiva, servir a su caballero en todas sus necesidades, tanto en tiempos de guerra como de paz. Si en una batalla un escudero demostraba una especial valentía, podía llegar a ser nombrado caballero por algún gran señor. En síntesis, la función de un escudero era aprender el mundo de la caballería, es decir, la heráldica, la equitación y el uso de armas. Las armas de un caballero medieval podemos clasificarlas en defensivas, para evitar ser herido y ofensivas, para atacar a sus adversarios. Cota de Mallas o Loriga Es la pieza principal. Está hecha de un tejido de anillas de hierro o acero unidas formando una camisa hasta las rodillas, ceñida por un cinturón y abierta por delante y por detrás para poder cabalgar. Llevaba un capuchón para proteger la el cuello, nuca y barbilla. Fueron agrandándose hasta cubrir las manos, con unas manoplas y las piernas. Pueden pesar 10 y 12 kilos, las de finales del siglo XII. Posteriormente se refuerzan en codos, hombros y rodillas con placas de hierro, además de tejer mallas dobles o triples. El arma de caballería más importante es la espada. Está constituida por tres partes: Hoja, empuñadura y pomo. Hay de varios tamaños y formas. Sus filos son duros y se utiliza como arma de corte, para golpear al adversario. A veces un cuchillo se usaba en el lado derecho del caballero. Una larga lanza se utilizaba en las justas, también hachas de metal, martillos de guerra, pesadas mazas de hierro, para derrotar al enemigo. Las más grandes son para la lucha a pie. El estoque es más corto que la espada, hería por la punta. Se llamaba misericordia a un puñal para dar el golpe de gracia al enemigo. La empuñadura es la parte de la espada con adornos más ricos, tiene forma de cruz. El pomo tiene forma de disco de 6 a 10 cm de diámetro; puede ser de algún metal precioso y en los cantares de gesta sirve como relicario, guarda reliquias de algún santo. Es la más noble de las armas, la heredan los hijos o ahijados del caballero. Los héroes épicos tienen su espada con un nombre. Se lleva colgada a la izquierda en la vaina que es de madera cubierta de piel. La más grande, para combatir a pie, la lleva el escudero. El estoque se lleva colgado a la derecha. Entre las armas arrojadizas son importantes el arco y la ballesta. El arco puede ser de madera o metal, su tamaño entre uno y dos metros y lanza una flecha, de unos 90cm, a una distancia que puede superar los 200 metros. Cuando el caballero no estaba peleando o guerreaba, mantenían y practicaban sus habilidades compitiendo en torneos y otras competiciones.