Elemento clásico del militarismo, la Dog Tag es el símbolo del honor, el legado y el respeto. Es utilizado por personal militar de todo el mundo para identificar al soldado, en un primer momento, en caso de que esté muerto.

Las famosas placas de identificación son básicamente dos placas de metal que llevan información, como el nombre, la edad, el tipo de sangre, la institución a la que presta servicio, datos sobre religión, alergias y también el factor RH.

En la historia de las civilizaciones y sus desencuentros bélicos, el principal objetivo de identificar a un hombre no es sólo informar quién es, sino quién fue, la bandera que porta y el ideal por el que lucha.

La cultura de atribuir marcas y características a los guerreros se ha expandido y desarrollado a lo largo de la evolución de la humanidad.

Los tribales, por ejemplo, se tatuaban el cuerpo de una forma única, para que sus familiares los reconocieran en caso de caída un poco más desfigurados en el campo de batalla.

Historia de la placa de identificación

Antes de que surgiera la placa de identificación, los soldados usaban sus propios recursos para que pudieran ser identificados, si era necesario. Algunos escribieron en unos pañuelos y lo colocaron junto al uniforme, otros hicieron un collar de madera con su apellido de soltero. Pero la mayoría de ellos cosieron su nombre en el uniforme.

El primer registro del uso del collar con placas de acero fue en 1864, durante la Guerra Civil, en los Estados Unidos. En 1899, estos collares fueron requisados ​​por el capellán Charles C. Pierce de Filipinas.

Luego los estandarizó, y el departamento de identificación de Filipinas también convirtió esta placa en el kit básico del ejército.

Sin embargo, recién en 1913, su uso se hizo obligatorio. La Marina de los EE. UU. usó discos metálicos que colgaban de los collares. En 1917, durante la Segunda Guerra Mundial, fue reemplazado por acero inoxidable, de forma rectangular con bordes redondeados.

Este modelo se volvió tradicional y se usa hasta el día de hoy.

Traducido libremente, Dog Tag significa "placa de identificación de perro". Este término se usó porque los propios soldados dijeron que los trataban como perros sarnosos mal cuidados.

Además de la apariencia, que se asemeja a la de un collar de perro. Su traducción dentro del contexto es placa de identificación.

Si el soldado regresaba sano y salvo de una guerra, regresaría a casa usando su placa de identificación. Muchos conservan sus placas y están muy orgullosos del accesorio que guarda tantos recuerdos.

Durante la Guerra Fría, que comenzó a mediados de 1949, después de la prueba de la primera bomba nuclear de la Unión Soviética, las placas de identificación tenían un uso específico. Por miedo a los ataques, se ordenaron dos millones y medio de placas de identificación más para que los niños las usaran y fueran identificados.

La Dog Tag en los tiempos actuales

Hoy en día, estas placas de identificación son utilizadas por cualquiera que quiera. Algunos lo usan solo por razones de diseño o para demostrar un estilo más vintage. Sin embargo, todavía tiene el mismo significado de la época de las guerras y puede ser muy útil.

Ciclistas, senderistas, actividades outdoor, policías, entre otros, pueden portar placa de identificación, ya que están expuestos a imprevistos.

La identificación del tipo de sangre, la diabetes, las alergias o incluso las personas que tienen alzhéimer utilizan este accesorio para ayudar en la vida cotidiana y no solo para mejorar la apariencia.

Pero lo más importante es que, aún como accesorio, no deja de cumplir su importante función desde hace siglos. Nadie es inmune a los inconvenientes y accidentes cotidianos, por lo que la placa identificativa puede cumplir su función en cualquier ciudadano.

Actualmente, el instituto de investigación estadounidense está perfeccionando y finalizando nuevos formatos de placas de identificación. Todavía está en fase de investigación y la actualización consiste en colocar un microchip en el diente del soldado. 

Eso es porque las placas de identificación fueron y siguen siendo objeto de robo. En Irak esto sucedió y aún sucede en Afganistán. 

Siempre pueden valer mucho dinero, por lo que viven en el punto de mira de gente de mal carácter que quiere dinero fácil. De esa manera, los soldados ya no correrían el riesgo de perder sus placas de identificación que ayudarían a mantener viva su memoria.

La Dog Tag es un símbolo eterno de respeto que nunca debe ser subestimado, es motivo de orgullo, ya que lleva el nombre y las características del guerrero más importante en el combate: tú. Ya sea en la guerra o para ayudarte cuando tengas algún imprevisto.