La caza es una práctica que se encuentra regulada estrictamente

Hoy en día el cazador aficionado es el gran responsable y financiador de estudios. Y también de  trabajos de investigación y conservación de las especies y su hábitat.  La caza en casi todos los países está regulada y gestionada de manera ejemplar y rígida.

No se sale por ahí con un arma en la mano disparando a todo lo que se mueva en el bosque. Se siguen normas y reglas sobre cantidades mínimas, épocas del año y otros factores en consideración.

Lo que mueve a un cazador a cazar, es todo el proceso que envuelve una cacería.

La caza mueve una gigante industria, que pasa desde tiendas de armas y accesorios, hasta el sector hotelero, gastronómico, artesanías, guías y muchos otros.

Antes de la civilización, la caza era la principal fuente de alimento de muchos de los grupos humanos.

Sin embargo, la expansión poblacional y el desarrollo de la civilización hicieron la recolección, la caza y la pesca, insuficientes para el abastecimiento de la población.

Con la explosión demográfica y la extinción o amenaza de extinción de varias especies.

Fue necesaria la creación de normas reguladoras de esta actividad.

Que sólo se permite en lugares determinados, para ciertas especies, en épocas determinadas y en cantidad limitada.

El sacrificio de animales por deporte es practicado por pueblos en varias partes del mundo.

Independiente de etnia y continúa presente donde hay condiciones y legislación permisiva para su práctica.

En los países europeos la caza ha sido practicada y regulada desde hace cientos de años.

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