Tras una jornada de caza o de actividad en el monte, quizás optemos por quedarnos en el campamento y pasar una velada nocturna con los compañeros mientras tomamos un café y comentamos como ha ido el día.

Hasta hace unos cuantos años, estas veladas se hacían alrededor de una pequeña hoguera que ponía luz tenue a la reunión nocturna, pero eso pasó a la historia porque ya no se permite encender fuego en el campo sin previa autorización y generalmente esta no se concede para estos fines.

Las noches de campamento se iluminan ahora con candiles eléctricos o de gas, que son totalmente portátiles y proporcionan buena luz durante horas.

Los modernos candiles o lámparas de camping  a pilas recuerdan a los que funcionaban con una mini bombona azul de gas que había que encender con una cerilla y después abrir el gas hasta que lámpara tomaba una luz blanca muy intensa.

Con el paso de los años  han aparecido otros modelos de candiles a pilas que evitan el engorro de llevar una bombona de gas y se encienden con solo darle al interruptor-

Este tipo de lámpara se utiliza para camping y para lugares donde no hay electricidad, y la luz que proporcionan es similar a las de las lámparas fluorescentes de casa, ya que estos aparatos portátiles llevan un tubo fluorescente que ofrece una luz blanca sin parpadeo que no molesta a la vista, y a pesar de su bajo consumo, la iluminación es similar a la de otras lámparas de mayor potencia.

Aunque normalmente se usan para camping, mientras que no salimos de acampada las podemos tener en casa y utilizarlas en caso de emergencia o corte de luz para no tener que andar encendiendo velas mientras vuelve la luz.