Practicar el tiro con arco te exigirá concentración, control de la respiración, pleno dominio sobre sí mismo. Cuando tiras con tu arco, todo tu cuerpo está actuando, la parte superior del cuerpo para la sujeción del arco y la tracción de la cuerda, la parte baja del cuerpo para el apoyo y la estabilidad. Pero eso no es todo, ya que los tendones de sus dedos, tus hombros y tus brazos también serán puestos a prueba para una mejor coordinación de tus movimientos y de tu equilibrio. Y sin olvidar la mente, la cual realizará el esfuerzo en materia de concentración y para no temblar antes de que la flecha salga disparada. La concentración es muy importante, bien para la mente como para el cuerpo, esto te ayudará a tener mayor rigor y precisión. Tirar con arco es una verdadera experiencia que se vive con el “yo” interior. Coordinar tu mente con tu cuerpo y ser metódico en materia gestual, son dos aspectos que el arquero debe tener en cuenta y así respetar cada una de estas etapas, unas tras otras hasta sentir una sensación de seguridad y dejar partir la flecha. La dificultad consiste en la capacidad de cada uno para saber reproducir este ritual en cada tiro. El tiro con arco es además un buen aliado anti estrés. La calma será su mejor amiga cuando quiera alcanzar su objetivo. Es el deporte ideal para fijarse objetivos y desafiar su capacidad de alcanzarlos en un ambiente totalmente amistoso. El único aspecto primordial es el escoger un arco adaptado a la morfología y a las capacidades físicas de uno mismo. Cada uno podrá disfrutar de esta actividad y un sano espíritu de competición. Tirar con arco en grupo es la oportunidad de hacer deporte mientras se pasa un buen momento. El tiro con arco es un deporte accesible para todos desde la etapa de descubrimiento de la actividad, tanto como actividad de ocio y como actividad deportiva. El progreso en el tiro con arco es fácil y rápido si estamos atentos y motivados. La calidad de su equipamiento le ayudará muchísimo a dar en el blanco. Es fundamental saber escoger sus flechas en función de su arco. Progresará rápidamente si respeta las etapas y adopta los gestos correctos. Encontrar el equilibrio correcto entre el dominio de sí mismo y la coordinación de sus movimientos, es la clave para el éxito.