Los arcos de polea son versiones modernas a los que se han incorporado poleas en los extremos de las palas a través de las cuales pasa una cuerda cuya función es tensar el arco.

Los arcos de poleas se han hecho muy populares tanto para tiro deportivo como para caza, aunque cada vez son más los aficionados que se compran un arco de este tipo para fines lúdicos, generalmente para la práctica de tiro y entretenimiento en parcelas, patios, fincas y campamentos juveniles.

La potencia de estos arcos y velocidad de disparo varía en función de las medidas, el peso y otros factores como la flexibilidad de las palas, o el diseño en sí , ya que cada fabricante realiza las correspondientes correcciones y cambios en los prototipos antes de sacar un arco al mercado.

Por poner un ejemplo, el Arco HellBow tiene una potencia regulable de 50 a 75 LBS y logra una velocidad de disparo de la flecha de 270 FPS, unos 316 kilómetros por hora, algo que está muy bien para un arco que pesa tan solo 2 Kg. y que no se consigue con otro tipo de arcos tradicionales, al menos si no eres un tirador profesional.

La ligereza de este arco entre otras cosas es debido a su mango de aluminio que además de pesar poco es bastante resistente y por supuesto con acabados de calidad que garantizan la larga vida del arco y el funcionamiento óptimo sin necesidad de mucho mantenimiento.

Precisamente este arco incorpora un visor de agujas que no todos llevan, y que permite al arquero apuntar al blanco de manera fácil, y esto combinado con que las poleas ayudan a tensar la cuerda reduciendo la fuerza que el arquero tiene que hacer, te permite concentrarte mucho más en el objetivo porque el cuerpo y especialmente los brazos están mucho más relajados.

Para practicar con la diana, es importante que estemos relajados, y que practiquemos bastante tirando primero a un blanco mas grande como una pila de pacas de paja hasta que centremos el tiro y concentremos todas las flechas, puesto que si nunca hemos tirado con arco intentar hacer diana a la primera de cambio es mas una cuestión de suerte que de puntería.

Para ir afinando la puntería y corregir la trayectoria de tiro es preciso que siempre tiremos de la misma forma y sepamos lo que estamos haciendo, ya que es obvio que si cada flecha la disparamos de una manera no se puede corregir el tiro porque no hay un método común.

Toca pues relajarse, adoptar la misma postura, utilizar las mismas flechas y disparar de la misma forma hasta conseguir centrar el tiro y a partir de entonces nos podremos centrar en la diana, primero en toda ella y poco a poco intentar dar en el centro corrigiendo los malos hábitos y adquiriendo mejor técnica.

Con los arcos de poleas te será mucho mas fácil afinar la puntería por lo que comentábamos mas arriba ya que al tirar de la cuerda el cuerpo no entrará en tensión y podrás moverlo hacia el blanco con mucha mas precisión que con cualquier otro arco que si requeriría mantener los músculos de los brazos en tensión.