Con la llegada de las temperaturas más cálidas, el huerto en Mayo se llena de actividad y la siembra y trasplante se hace habitual llenando el terreno de nuevas plantas dándole un aspecto de esplendor justo a mitad de la primavera.

A principios de Mayo la temperatura comienza a subir y además hay más horas de luz directa que inciden directamente sobre los cultivos del huerto.

La germinación, el crecimiento de la planta y la fructificación se producirán naturalmente y de forma mucho más rápida que durante el invierno porque las temperaturas son más óptimas  para el crecimiento natural de las plantas.

La siembra de Mayo

Este mes se pueden plantaren en semilleros al descubierto  calabacines, coles de Bruselas, repollo, coliflor, lechugas, puerros, pepinos y melones.

También podemos sembrar directamente en el huerto las calabazas, calabacines. coles, espinacas, judías, rábanos. repollo, coliflor, lechuga, puerros, pepinos y melones.

Si tenemos plantas o planteles para trasplantar, ahora podemos ponerlas definitivamente en el huerto los calabacines, berenjenas, calabazas, coles, cebollas, pimientos, puerros, melones y las matas de tomates de cualquier variedad.

La cosecha de Mayo

Es el tiempo de recoger los ajos tiernos, la cebolla blanca, el apio, los espárragos, acelgas, lechugas nabos, puerros, rábanos y zanahorias.

Las primeras cosechas hay que reemplazarlas por otras y aprovechar el tiempo para sembrar y poner tutores para los tomates y judías de enrame ya que al ser plantas de crecimiento vertical hay que proporcionarles el apoyo necesario para soportar el peso de sus frutos mediante cañas o tutores a los que iremos sujetando las matas con cuerda de manera que no se le cause daño a los tallos.

Si queremos calidad y no cantidad, tendremos que aprovechar el tiempo y podar las tomateras quitando los brotes secundarios con unas tijeras de podar si son pocas matas o utilizar unas tijeras de podar eléctricas para realizar la poda en mucho menos tiempo.